Tener una mala digestión va mucho más allá de un malestar o sensación de pesadez estomacal. Puede ocasionarnos enfermedades a largo plazo y afectar directamente nuestra rutina y estilo de vida. No se trata de comer o dejar de comer algunos alimentos. Al contrario, se trata de comer correctamente y crear hábitos para tener un proceso digestivo sano en todo momento.
Cinco hábitos para tener una buena digestión todos los días
Establece horas específicas para cada comida y trata de cumplirlas. No creas que porque un día te salgas de este horario tendrás una mala digestión, ¡para nada!, pero algunos estudios indican que comer a horas puntuales genera una dinámica en el cuerpo que aumenta tu energía, quema grasas y lo mantiene constantemente activo.
Consume más verdes y grasas sanas. Hortalizas,, verduras, frutos secos, aguacate y pescados son los aliados ideales para tener una digestión saludable. Crea un plan alimenticio que pueda incluir estos grupos de alimentos y otros que no tienes por qué abandonar. Te dejamos aquí algunas ideas de ensaladas que te van a encantar.
Agua. Mantenerte hidratado es una de las claves para digerir sin problemas. Pon alarmas, recordatorios en tu móvil y siempre lleva una botella de agua contigo. Tu organismo y tu bienestar te lo agradecerán.
Deportes. Al menos tres veces a la semana haz ejercicios. No importa el tipo de disciplina, apúntate a la que mejor vaya con tu ritmo de vida y te guste más, la idea es mover un poco el cuerpo.
Enfócate. Aunque no lo parezca, comer haciendo otras actividades afecta directamente nuestra digestión. Para tu próxima comida prueba a centrarte en lo que estás haciendo y saborea cada alimento, come con calma y verás cómo tu digestión mejora.
Recuerda que, adquirir nuevos hábitos no es una tarea fácil, pero tampoco muy difícil. No dejes de intentarlo, no desistas si un día no cumples algún paso, busca las mejores vías para ti y tus necesidades e inténtalo siempre un poco más.
